La subestación compacta tiene las características notables de tamaño pequeño, huella pequeña, instalación fácil y operación confiable. Su material suele ser una carcasa de metal liviana de alta resistencia, y los componentes internos, como los transformadores y los disyuntores, utilizan materiales de aislamiento de alto rendimiento y materiales electromagnéticos avanzados para garantizar la seguridad y la eficiencia. Las ventajas de las subestaciones compactas son que reducen significativamente la ocupación de la tierra, reducen los costos de construcción, acortan los períodos de construcción y son fáciles de mantener y expandir. Se utilizan ampliamente en la transformación de la red de energía urbana, parques industriales, parques eólicos, estaciones de energía solar y otros lugares donde los recursos de la tierra son ajustados o deben desplegarse rápidamente, mejorando efectivamente la confiabilidad y flexibilidad de la fuente de alimentación